Días pasados, quien escribe esta nota, tuvo la oportunidad de visitar a la Doctora Juana Vaccaroni de Soria. Los que compartimos algunas horas con ella, la llamamos simplemente Juanita.
Me recibió en el patio de su casa. Cuando crucé el zaguán, luego de ser atendido por una señora, noté que estaba esperándome de pié, al lado de su silla, para fundirnos en un abrazo. Me pareció un gesto generoso de su parte.
Pensé qué ingratos somos con los amigos. La vida nos exige cumplir con la rutina y no nos damos el tiempo suficiente para visitar a la gente que construyó esta ciudad con sus historias de vida.
Juanita me sorprendió cuando me contó que lee todos los martes la columna Panorama Urbano que publicamos en el diario La Unión. Y también me dijo que me llamó por teléfono en varias oportunidades para intercambiar impresiones sobre estos escritos.
Y es que ella conoce SFVC como nadie y tiene fresca en su memoria muchos recuerdos de las calles de la ciudad de Caravati. Tanto es así, que fue invitada al acto inaugural de la puesta en valor de la ex Estación de Trenes del Ferrocarril General Belgrano, enmarcado en los festejos por el 327º aniversario de la Ciudad.
Juanita habrá pensado, mientras asistía al acto en la estación Capital, que la ciudad de SFVC seguramente era más linda de lo que es hoy en día. Imagino esto, por la forma en que juzgan nuestros vecinos las fotografías de los primeros años del siglo XX, comparándolas con las de los primeros años de este siglo XXI.
Habrá reflexionado, también, mientras el intendente cortaba las cintas del edificio, que esta ciudad era considerada un ejemplo, por la coherencia de su paisaje urbano y por el contexto cultural de la época. Habrá asentido con lo que un arquitecto colega afirmó en una oportunidad: “la ciudad de Catamarca era como la Atenas del Norte Argentino…”
Habrá recordado aquellos días en los que, siendo una adolescente aún, subió al tren para ir a estudiar abogacía a Córdoba. ¡Qué amor del padre de Juanita al alentarla a dejar el campo para ir a la gran ciudad para ser alguien! ¿Por qué una mujer no podía ser profesional? Ese padre la habrá marcado a fuego, brindándole seguridad en la vida…
Y es así que la Doctora Juana Clotilde Vaccaroni de Soria, volvió con su título de abogada bajo el brazo y tuvo una importante vida pública. Fue Procuradora General y Ministro y Presidente de Corte de Justicia de Catamarca. Años más tarde fue Diputada provincial en dos períodos.
Recuerdo que Juanita –mientras recorría la provincia como candidata a gobernadora por el Frepaso– se lamentaba por no tener diez años menos… ¡Pero si tenía tanta energía como si fuera una mujer de veinte años!
El Concejo Deliberante la declaró Ciudadana Ilustre de San Fernando del Valle de Catamarca. El legislativo municipal quiso honrar y rendir un merecido homenaje a una persona con una actividad legislativa desarrollada en beneficio de la sociedad catamarqueña, y una constante lucha por una sociedad más justa. Además, la idea de esta declaración fue «reconocer y revalorizar lo actuado por personas que nos precedieron en la vida, permaneciendo su espíritu de contribuir al engrandecimiento de nuestra provincia».
A mi me tocó conocer a Juanita, haciendo una consulta profesional en su estudio. Nunca voy a olvidar con qué resolución defendía mis convicciones, como si fueran las de ella. Ese día entendí que era una gran mujer. Lamento no haberla visitado mas seguido. Sirva este recuerdo como muestra de afecto de muchos vecinos de SFVC hacia usted, que en este momento se le deben estar humedeciendo los ojos…